Gadime

Al sur de Pristhina, por la carretera a Skopie, se encuentran las cuevas de Gadime. Son cuevas de estalactitas y estalagmitas; la visita merece la pena.

Estas cuevas fueron descubiertas en 1969 por casualidad, al caersele a un paisano una herramienta manual por un agujero. Se metió por él para recuperarla, y descubrió una sala con estalactitas. Avisó al ministerio, y 7 años después, tras retirar un montón de sedimentos, las abrieron al público.

Lago

Las rocas son mármol y aragonito, principalmente. El guía enseña la planta baja, porque a otros dos niveles hay más galerías. Nos dijo que se calculaba que al menos había 20 km de recorrido; la visita solo recorre 500 metros. Hay unas cuantas charcas con agua, algunas conectadas con enormes lagos subterraneos, según nos comentaron.

Es una cueva particular, en la que a los niños de un grupo, que visitaban la cueva a la vez que nosotros, les estaba permitido jugar al escondite tras las estalagmitas, te dejan sacar las fotos que quieras, tocar todo... Otra cosa que me llamó la atención fue el musgo que crecía junto a las lámparas; con ese olor a musgo húmedo característico, una de las zonas me recordó a un belén, con María con el Niño en bazos y San José de pié a su derecha.

Belén

Vimos estalactitas, macarrones, incluso algunas excéntricas, columnas, coladas y banderas. El guía incluso improvisó un concierto sacudiendo con los nudillos una bandera, a la que llamó piano. Así que daros prisa en visitarla, porque me temo que el piano no le va a durar mucho.

Bandera

Macarrones

Techo

Las fotos están hechas con la cámara de Torpedone Capri. ¡Gracias majo!