domingo, 22 de enero de 2012

El retorno (al congelador)

Ya estoy de vuelta de vacaciones. Aterricé en Pristina por la noche, tras tomar tres aviones y correr por media Europa.

El día previo a regresar a Kosovo fué mi cumpleaños, y lo celebré con los amigos. A pesar de intentar volver pronto a casa, al final solo dormí cinco horas, con la intención de recuperarlas en los aviones. Mala idea; mi cuello quedó seriamente dañado por las malas posturas y cargar con las bolsas. Hacía escala de tres horas en Ginebra, y como no la conocía, di una vuelta rápida (al trote) por la ciudad. Me defraudó un poco, esperaba que estuviera a la altura de Zurich. Pero la vista de la ciudad con los picos nevados de fondo merecía la pena. Seguro que esta ciudad puede dar más de si, la próxima vez prepararé la visita en vez de ir sin plano.

Río Ródano, a la salida del lago Lemán. Al fondo, los nevados montes Jura.

Y aterricé en Pristina.

En realidad aterricé dos veces:
  • La primera con el avión y resto de pasaje, sin incidencias.
  • La segunda a la salida del terminal, tras un patinazo sobre una placa de hielo, con mis maletas, con incidencias: glúteo superior izquierdo dañado.
Pasé en pocas horas de 15º C a -8º C. De vuelta a la cruda, fría y dura realidad. Esto lo digo por el suelo.

Afortunadamente llegué hasta el coche sin más percances. Estaba bajo una capa de nieve de medio palmo de espesor, y curiosamente arrancó a la primera.

Para quitarle la nieve utilicé las manos; error de principiante, en seguida te duelen una barbaridad. Al final un poco de paciencia, la calefacción del coche y las manos doloridas consiguieron que pudiera conducir aceptablemente. Las ruedas de invierno y la tracción a las 4 ruedas hiceron el resto.

Los días siguientes me he dedicado a observar las técnicas de los aborígenes, pues suelen ser las más efectivas. Resulta que aquí barren la nieve con escobones de ramitas, y resulta muy eficaz salvo si se han formado placas de hielo. Para este caso me contó un amigo que trabajó en Escocia - que de nieve también saben un rato - que allí se colocaba un cartón sobre el parabrisas cuando aparcabas el coche, y al día siguiente solo había que quitar el cartón y el cristal impecable.

A pesar de la temperatura no estoy pasando frío, gracias al regalo que me hicieron los amigos: gorro para frío que también cubre las orejas, camiseta térmica y calzoncillos largos, como se ve a los vaqueros en las películas del oeste las raras ocasiones que se bañan. El aspecto que tengo con todo es de lo más cómico, parecido al de Peter Pan, pero ande yo caliente... Unas botas térmicas e impermeables recien adquiridas hacen el resto.

La gente de Pristina no deja de llevar vaqueros, parece un uniforme. Y gorros, por supuesto. Tras el partido Real Madrid - Barcelona los azulgranas siguen sacando pecho, y si no fijaos en los gorros de la foto.


Una de las noticias de la semana pasada, también aquí, fue el pisotón de Pepe a la mano de Messi. Se han dicho muchas cosas, pero os voy a contar lo que pasó en realidad. Resulta que tras una rápida jugada, Pepe creyó ver cinco gusanitos que intuyó estaban merendandose el césped del Bernabeu. Se dijo: "Voy a machacar bien esos cinco gusanitos, non vayan a dejar o meu campo como un patatal". Terrible confusión, propia del cansancio por la paliza que les estaban dando. Afortunadamente tras el primer pisotón se percató de que los cinco gusanitos salían de algo parecido a la palma de una mano, por lo que procedió a suspender la eliminación de los gusanitos. Porque nadie dudaría que como se empeñe en eliminarlos, los desintegra.

Que se aplique a Pepe el título de esta entrada, al menos hasta que mejore sus problemas de vista.

5 comentarios:

  1. La parábola de los gusanitos no está mal enfocada...jeje. Animo que ya queda menos para el deshielo!...

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  2. Bueno, no hace falta irse a Escocia para conocer el truco del cartón. Las heladas de los coches en Castilla se afrontan de la misma manera.
    Has vuelto muy bien preparado asi que el frío no será nada para ti con ese atuendo. (ponte el gorro escocés y ya triunfas).
    Besos

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  3. Bueno, bueno, ahora a seguir currando por esos parajes tan bonitos y a seguir contándonos cositas tan entretenidas.
    Un besazo desde Madrid

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  4. Fer, hoy es el Día D... espero que puedas sacar esa bufanda del Madrid que fijo guardas escondida como un tesoro... ondéala al viento!!! Al frío viento kosovar!!!
    Hala Madrid!!! :-)

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  5. Me alegro del reinicio del blog.
    Muy buena idea lo del cartón.

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